España necesita, más que sabios, apóstoles; más que doctrina, organizaciones; más que discurso, directores de masas. Nuestro mal ha sido la falta de hombres formados; por lo cual, si lográramos con estas páginas contribuir a orientarlos, nos daríamos por muy contentos.
Todo hombre de acción debe estar persuadido de que no hará lo que se propone sin contradicciones. Le sobrevendrán, cuando menos lo piense, de donde menos imagine: de en medio, de abajo y de arriba. Es ley general que una obra tiene tantas más y mayores dificultades cuanto sea más importante y trascendental.
La mayor parte de nuestros errores en la defensa de nuestras ideas dependen de que prácticamente partimos del supuesto de que no vivimos en estado de lucha, en que hay que arriesgarlo a veces todo; no sólo la tranquilidad, sino la hacienda y la vida. De ahí que adoptemos tácticas peregrinas y sobre todo cómodas.
Es sin duda un libro OBLIGATORIO para todo joven, con inquietudes y ganas de cambiar las cosas que hay en su alrededor. No nos es lícito permanecer impasibles y pasivos ante la cantidad de desgracias que ocurren a nuestro alrededor (pobreza, crisis económica, aborto, Educación para la Ciudadanía, en definitiva ZP…)
Es nuestro momento de actuar. ¿Te animas? No al aburguesamiento, No a la mediocridad.
Gran Capitán
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